martes, 14 de junio de 2011

A Katy Perry se le sale una teta.

Aunque su disco tenga más singles que Paris Hilton enfermedades venéreas, Katy Perry y sus orondos productores han decidido sacar uno más, pero esta vez haciendo las cosas bien.
Last Friday Night es una mierdecita pop de estas que se te olvidan en un par de semanas, pero cumple su función: entretener. Y el vídeo, aunque sea una horterada con todas las letras y haya teorías de que esté inspirado en esta parodia hecha el año pasado, hay que admitir que es una frikada perfecta.



0:30 - No creía que Katy pudiese parecer más tonta. Me equivocaba.
1:11 - Seguro que te diste con el palo de la escoba mujer...
1:26 - Así no se hace un sudoku.
1:47 - Lo siento pero esto es demasiado para mí. PERFECCIÓN.
2:24 - Yo cuando me presento lo primero que hago es enseñar mis abdominales de piedra. Nunca falla.
2:41 - Como si te hicieran falta...
2:49 - Rebecca, lo de extender cera no es lo tuyo chiquilla. Como cantar.
3:57 - Kenny G. Ehtupendo.
4:20 - Seguro que es el mejor sitio en el que vomitar. ¿Para qué usar el baño?
4:46 - Presiosa que t'ha dehao la Rebe, oye.
6:19 - Será furcia... ¿Quién desayuna un plátano?
6:28 - Precioso plano de Rebecca.
7:23 - Ahí está la teta. Y es una tía quien le baja la camiseta. Ayyyy, picaroona.


Katy, no tendrás buena voz y puede que tu música sea juzgable, pero con esto nos has demostrado que tienes un estupendo sentido del humor. Incluir a Rebecca Black en el vídeo es simplemente brillante. CHAPÓ, KATY.

Chapó.

lunes, 6 de junio de 2011

Clare Maguire, o las acelgas también cantan.

En el mundo nunca habrá demasiadas vocalistas. Intuyo que Clare Maguire se dijo esto un día en su piso de Londres a remojo en su bañera gigante mientras se comía una tarrina de litro de Haägen-Dasz contemplando la foto de su ex, como cada jueves.

Estaba yo un día aburrido y por algún motivo acabé viendo el vídeo de su primer single, Ain't Nobody. Me gustó, la verdad. Me gustó su rollito de cantante-sentida-que-hace-musica-mas-bien-aburrida-con-vídeos-pseudoprofundos.

Esta muchacha, de cara olvidable, tiene una voz cojonuda. Muy amplia, de eso que abarca miles de octavas y así. Tan pronto canta con voz de marimacho como da un berrido hiper-agudo digno de la mismísima Rihanna. Y yo, que soy mucho de voces femeninas, decidí descargarme su disco, Light After Dark.


El disco empieza bien, tras una intro totalmente ignorable suena The Shield and The Sword, una canción que suena a temazo así sentido, de estos que suenan mientras la chica llora de rabia corriendo bajo la lluvia preguntándose cómo puede ser tan estúpida. Dirás, una canción así irá acompañada de un vídeo acorde, con sentido y relación con esa letra tan llena de rencor.
Sin embargo, por algún misterioso motivo sus managers decidieron que sería una buena idea coger los looks más ridículos de Katy Perra, Lady Guarra y la dignísima Adele y grabar una de las mayores horteradas que he visto.


Sin embargo, aunque el disco empiece aparentemente potente, de algún modo se convierte en una sosada tristona, repetitiva y monótona. Hay algo que no acaba a convencer de esta chica. Algo falla.
Está claro que su discográfica ha puesto pasta en ella, véase su página web o sus horteravídeos. ¿Pero cuál es su problema? La voz no, sin duda. Quizás el género no sea el adecuado. Tal vez su imagen tampoco ayude. Pero sin duda su mayor problema es su falta de carisma.

Es sosa a más no poder. Un envase bonito para una voz de la hostia, pero sin nada más dentro. Ni expresiones faciales ni sentimientos más allá que lamentarse de la muerte de Michael Jackson. Podría llegar lejos, pero tiene el carisma de una acelga.

Es una acelga con una voz increíble.



Pero una acelga al fin y al cabo.


Carta a mí mismo: El miedo al pop

En este año largo de ausencia, también conocido como Erasmus, no os creáis que solo me he dedicado a rascármelos a dos manos. He bebido , ...