Porque la horteridad no sólo existe ahora, ha existido durante años. Desde el chándal de tactel a la riñonera, pasando por Christina Aguilera.
Todos sabéis lo mucho que aprecio su música. No contenta con darnos la tabarra a finales de los 90, al ver que nada de lo que hacía tenía éxito decidió prostituirse. Aún más, quiero decir. ¿Cómo? "Haciendo" una canción para la banda sonora de una película que gracias a Björk no he visto: Moulan Rouge.
Pero no ella sola: si a los gorgoritos de Christina le sumamos el bollerismo de Pink, la innecesariedad de Missy Elliot y la indiferencia que me provocan las otras dos furcias tenemos como resultado el videoclip que inspiró la idea de esta vomitiva sub-sección.
Con todos ustedes, el vídeo para la canción más repetida en cualquier radio del mundo occidental: LEIDI MARMALADE.
0:01 - Ladies and gentlemen, welcome to the puticlub.
0:22 - ¿Quién eres?
0:46 - No me toquéis más, que es a euro el minuto.
0:59 - "Sí, ¿es la policía? Verán, es que me ha parecido ver al payaso que estaba desaparecido"
1:15 - Quichi quichi yaya chacha, quichi quichi yaya hí. LETRAZA.
1:44 - NO ME PEGUES POR FAVOR.
2:11 - Eh... estaría muy bien que dejases de hacer eso. Sí.
2:41 - Mi horterómetro ha pasado a mejor vida.
3:01 - No veo la diferencia.
3:13 - Orgasmar maquillándose.
3:33 - Estoy seguro de que el confetti era imprescindible.
3:56 - Mujer del fondo, deja de tocarle el pelo, que eso no tiene remedio ya.
Y lo peor de todo es que Mulán no ha salido ni una vez.
He dicho.